Ingredientes (6 personas):
- 12 placas de lasaña normales (o 6 grandes)
- 200 gr. de lomos de atún “al natural” (o Bonito del Norte)
- 250 ml. de salsa de tomate
- 4 huevos duros
- 1 cebolla grande
- 1 pimiento rojo mediano
- 100 gr. de queso para gratinar
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta negra recién molida, al gusto
- Salsa Bechamel: 500 ml. de leche
- 60 gr. de harina
- 80 gr. de aceite de oliva
- nuez moscada y sal (al gusto)
Preparación:
- El primer paso lógico es ponerse con los huevos y cocerlos. En una cazuela ponemos agua a hervir, cocemos los huevos, pelamos y reservamos para más adelante.
- Picamos el pimiento en tiras. Los colocamos en un plato, tapamos con film transparente y cocinamos en el microondas 5 minutos a máxima potencia. Con esto conseguiremos una textura parecida al pimiento asado o morrón. Retiramos y reservamos.
- Cortamos la cebolla en “brunoise” y sofreímos 5 minutos(fuego medio) en una sartén con un poco de aceite de oliva virgen extra. Cuando esté blanda, picamos los pimientos y los añadimos. Mezclamos, salamos al gusto y seguimos pochando otros 5 minutos.
- Picamos ahora los huevos cocidos en pequeñas porciones y también los echamos con el resto de ingredientes. Mezclamos.
- A continuación, vertemos la salsa de tomate y el atún. Mezclamos todo con cuidado y dejamos cocinando a fuego bajo unos 5 minutos. Pasado el tiempo, retiramos a un plato/fuente y dejamos enfriar. Es necesario que esté el relleno frío a la hora de preparar las capas de lasaña.
- Mientras que se enfria el relleno, tamizamos la harina con un colador. Este paso es muy importante para que luego no se produzcan grumos.
- Ponemos en un cazo a calentar a fuego medio con la leche durante 4-5 minutos sin que llegue a hervir. Este paso es para luego acelerar el proceso de preparación de la salsa.
- En otro cazo introducimos el aceite, y cuando esté caliente, añadimos la harina tamizada. Dejamos que se mezcle hasta que formen pequeñas masas de tono dorado. Esto es muy importante porque si la harina queda cruda la bechamel sabrá mucho a harina y no es lo que queremos.
- Removemos muy bien con una cuchara de madera la harina con el aceite.
- Echamos la leche caliente en el cazo con la harina, añadimos sal, pimienta al gusto y un poco de nuez moscada molida.
- Removemos de manera continua con una varilla (5-6 minutos). Vamos controlando la temperatura, en este paso lo mejor es dejarlo al mínimo.
- Quedará un mezcla homogénea y lo más importante sin grumos. Si no tenéis controlada esta salsa y os quedan grumos, podéis arreglarla con un toque de batidora. Así os quedará perfecta.
Montaje de la lasaña:
Precalentamos el horno a 200º C.
- Escogemos una fuente apta para horno, con alto de altura (5-6 cm.). En la base echamos una capa fina de bechamel, y sobre ella colocamos una fila de placas de pasta. Recortarla si es necesario para dejar toda la superficie cubierta.
- Vertemos un poco de relleno sobre la pasta y extendemos uniformemente. De nuevo, colocamos otra capa de pasta, seguimos con la bechamel, y añadimos algo de queso. Repetimos el proceso.
- En la capa superior rematamos con el resto de la bechamel y abundante queso para gratinar, bien repartido por toda la superficie. Colocamos la fuente en posición central y horneamos la lasaña. Primero 15 min. a 200º C y para darle el toque final, dejamos 5 minutos con la función “grill” activada.
- De esta manera se dorará la superficie y quedará el queso bien gratinado.
- Retiramos del horno y muy importante, la dejamos reposar para que se asiente. La lasaña sale muy caliente y se desmotarán las placas si queremos cortarla en ese momento. Pasados 5/6 minutos podemos ya llevarla a la mesa y servirla sin problemas.