Ingredientes:
- tostas finas
- 1 rollo de foie micuit
- 100 ml. vino moscatel
- 1 gr. agar-agar
- 300 ml. aceite de girasol
- 1 jeringuilla o biberón
Preparación:
- Ponemos el aceite de girasol en un vaso alto y ancho. Lo metemos media hora en el congelador, pues nos interesa que este muy frío.
- Ponemos el vino moscatel en un cazo y le añadimos el agar agar. Removemos con unas varillas para que se disuelva todo.
- Una vez disuelto lo llevamos al fuego hasta que llegue a ebullición, removiendo de vez en cuando.
Cuando comience a hervir, lo tendremos 2 minutos en el fuego removiendo y apartaremos. - Lo dejamos templar unos 4 minutos y llenamos una jeringuilla o un biberón con el líquido.
- Sacamos el aceite del congelador y vertemos en él la solución que tenemos en la jeringuilla gota a gota.
Vamos echándolas separadas para que no se junten. Veremos que al principio se quedan flotando y poco a poco se van hacia el fondo. - Dejamos reposar las gotas en el fondo del aceite un rato para que se cuajen del todo. Las sacamos con cuidado y las ponemos en un colador.
Con cuidado de que no les de directamente el chorro, las lavamos con agua muy fría, para eliminarles el aceite. Reservamos. - Colocamos las tostas en la fuente donde las vayamos a servir.
- Laminamos el foie muy fino y lo vamos colocando encima de las tostas.
- Colocamos una cucharadita de caviar de moscatel encima de cada tosta y servimos.